El fiscal supremo Tomás Gálvez anunció que iniciará una nueva etapa de carácter más confrontacional, en la que exigirá su reincorporación al Ministerio Público y promoverá una reforma estructural de dicha institución.
Gálvez informó que intentó reunirse con la actual fiscal de la Nación, Delia Espinoza, con el propósito —según afirmó— de unificar esfuerzos frente a la crisis institucional que atraviesa el Ministerio Público. Sin embargo, su solicitud no fue atendida directamente, y se le pidió formalizarla por escrito, sin establecerle un plazo específico.
El fiscal cuestionó la actitud de Espinoza, calificándola de “mediocre”, y lamentó lo que considera una falta de comprensión sobre el rol institucional de la Fiscalía de la Nación. “Cree que esto se maneja como una chacra”, declaró, en alusión a lo que considera un obstáculo al diálogo interno en la institución.
En una conferencia de prensa posterior, Gálvez acusó a la Junta de Fiscales Supremos de ser responsable del deterioro institucional del Ministerio Público, señalando que su accionar ha agravado la crisis y debilitado la autonomía de la entidad.
Ante la falta de canales de diálogo, el fiscal afirmó que intensificará sus acciones para lograr su reincorporación y presionar por cambios profundos en la estructura del Ministerio Público.